viernes, 2 de julio de 2010

Siguiendo


Sonoras distancias me habitan lejanas, entonces voy y respiro, confiada ausencia de mis desgracias...
Caigo nuevamente contigo; no me limita el tiempo ni el muro indestructible de tu silencio, sólo escribo y caigo, sólo pienso y pierdo...
Sólo uno, dos, tres...y llego al ocho; salté la muralla y perdí el registro de mi historia...
Ahora pienso y caigo, y me caigo en ti, y me caigo en lo mismo; me quedo sentada esperando la mano que me acariciaba el cabello; ahora vacía mi cabeza se queda...
Llego al ocho y el infinito mi abruma, me ahoga, me tortura; quiero ponerle fin a esto, a las vibraciones que me llevan al sentimiento ingrato de ti; creo una entrada y cierro una puerta; la misma piedra sigue en el camino, ahora tengo que rodearla.

No hay comentarios: