lunes, 29 de septiembre de 2008

Yo no soy así


Como explicar que a veces somos o hacemos cosas que simplemente dijimos...."eso jamás lo voy a hacer" y resulta que después, el sistema, los sentimientos y ciertas actitudes nos consumen y nos hace realizar cosas impresentables o que están fuera de toda moral, de lo que me enseñaron las monjas o que a punta de palos me enseñó mi mamá...
Como dicen por ahí, el Amor hace a las personas idiotas, que hacen cosas innimaginables: no dormir en las noches esperando a que "esa persona" llame o se conecte, hablar a horas indeseadas, viajando a horas peligrosas, decir cosas tontas y dejarse llevar por la sensación del momento. Quizás, hasta a mí ahora me parezca ilógico, pero ansío volver a sentir esas ganar de dejarse llevar por las emociones y como dice Coco Legrand "ver angelitos saltanto a poto pelado de nube en nube"
Pero tal como el Amor entrega sensaciones placenteras y la autorización para hacer cosas impresentables, el odio, la rabia, el dolor, la desconfiancia y desilusión, también la hace cometer a una estupideces.
El dolor ciega a las personas y pierde la cordura, empieza a desconfiar de todo y a buscar claves que le digan que una está en lo cierto...caemos en hechos absurdos y socialmente castigados...después cuando se supone que todo está claro uno comienza a exigir cosas como creyendo que con eso se aplaca el dolor y se olvidan las penas, o se devuelve de alguna forma la calma. El problema es que yo...NO SOY ASÍ....y lejos de aliviar, deja una sensación de vacío que nos dice que estamos haciendo lo incorrecto, pero ¿qué hacer?...borrar todo de la mente, buscar una nueva vida o hacer la vista gorda de todo?...yo NO SOY ASÍ, pero lamentablemente tendré que acostumbrarme o volverme una cínica.

jueves, 25 de septiembre de 2008

Mala Onda


Quiero empezar, con un breve párrafo de mi libro favorito, MALA ONDA, del chileno Alberto Fuguet...toda esa onda, esa mala onda me traspasa cada vez que lo leo, y no es que me ponga a odiar al mundo, analizarlo y criticarlo en la más mala...es mi onda la que se traspasa al libro, como si en algún momento yo fuera Matías y me diera cuenta que no tengo alternativas en mi vida, que estoy sola, que mi amigo ya no lo es tal y que lo que amo es inalcanzable, no porque sea superior a mi, sino porque no encaja, como una pieza redonda en un rompecabezas tradicional, por más que trate de hacerlo parte del todo, nunca, nunca y nunca lograré que lo logre...y da rabia, pena, aungustia, pensamientos suicidas y algo parecido a depresión...no sé, recomiendo el libro porque es excelente, pero sólo aquel que tenga la mente fría y el corazón latiendo por alguna razón, podrá leerlo sin la sensación de tomar un avión con un pasaje sin regreso o definitivamente darse cuenta que esto no es lo suyo y lanzarse al río más próximo, o aunque sea una pileta, da igual...de cualquier forma desaparecerá de esta verdadera existencia.



"Y esta es una de las peores situaciones en que uno se puede encontrar. Es como estar en un aeropuerto con pasaje para todas partes y no saber qué avión tomar. O peor: averiguar que ningún avión va a partir. O querer partir y darse cuenta de que no tienes pasaporte. No sé, algo así. Es realmente molesto y aterrador y se trasforma en un círculo vicioso existencial que no conduce a ninguna parte. Basta con analizarlo, ponerse a pensar en todas las aburridas y predecibles oportunidades que nos ofrece el futuro, y en las más entretenidas y fascinantes, para darnos cuenta de que estamos en serios problemas.
Tú antes no eras así..."